Desde la presentación del Informe Hay Futuro Si hay Verdad y la Convocatoria a La Paz Grande, de la Comisión de la Verdad de Colombia, además de las acciones de pedagogía y socialización que adelantan exintegrantes de la entidad, incluyendo los antiguos comisionados/as, la vigencia y permanencia del Informe Final y del Legado se ha mantenido en la agenda nacional e internacional gracias en gran parte al proceso de Trabajo en Red entre Aliados.
Este proceso, en el cual participan más de 2.000 organizaciones de todo el país, ha tomado como suyos los hallazgos y recomendaciones del Informe de la Comisión y está comprometido con la incidencia y materialización de acciones encaminadas a desmantelar los factores de persistencia del conflicto y la violencia, construyendo caminos y tendiendo puentes con múltiples actores para transitar a la convivencia pacífica en democracia.
La Comisión de la Verdad, como hito histórico de la institucionalidad, nos dejó un primer Legado de comprensiones exhaustivas alrededor de ¿por qué nos pasó lo que nos pasó? Unas recomendaciones para que no volvamos sobre el camino de la inhumanidad y la muerte, y un inmenso material para la discusión y el diálogo público.
Podríamos agregar que un ‘segundo Legado’ de la Comisión fue ese camino diferente que nos mostró cómo construir Estado desde los territorios y no desde el escritorio (ver artículo El Otro Legado de la Comisión de la Verdad: bit.ly/3Pb3dLY), pues fue una institución realmente pública, en diálogo permanente con la ciudadanía, que tejió desde los territorios y para ellos. Y tenemos en nuestras manos este ‘tercer Legado’, de un entramado de organizaciones sociales diversas con un espíritu colectivo para que las recomendaciones se implementen efectivamente en todos los territorios del país. Un paradigma de colaboración sin igual en Colombia.
A nivel nacional y territorial se han desatado cientos de acciones de apropiación y se están construyendo planes de acción para garantizar que el Informe de la Comisión de la Verdad no se quede en los anaqueles de las bibliotecas, sino que se transforme en una ruta programática de construcción de paz orientada a desentramar el complejo conjunto de factores que originaron y mantienen el conflicto armado y la violencia, soportados en modelos individualistas y excluyentes que inhiben la inteligencia solidaria y colaborativa requerida para la paz estable y duradera. Con motivo de la conmemoración del Primer año del Informe de la Comisión, hemos mapeado más de 200 acciones de aliados a lo largo y ancho de Colombia y en el exterior, enmarcadas en el objetivo de ser #UnaConversaciónPermanentedePaís.
El Trabajo en Red entre Aliados es, debe ser y será ese ‘tercer Legado’ de la Comisión, con toda la fuerza y potencia para desatar un proceso colaborativo sin igual en Colombia, entendido como una apuesta programática y política que consolide una fuerza social amplia, suficiente y autogestionada para apropiar y contener en el tiempo los hallazgos de la Comisión y aportar en la materialización de las recomendaciones para la no repetición.
Esta acción social conjunta aliada será capaz de impulsar una movilización social sólida, sostenida, y comprometida con promover y afianzar los cambios culturales e institucionales requeridos para la transición a la convivencia pacífica, al tiempo que con su creatividad aporta propuestas para el cumplimiento de las recomendaciones.
Si bien construir un paradigma de colaboración es todo un desafío, ya estamos unidos en el propósito de la apropiación social Legado de la Comisión de la Verdad. Vamos por buen camino, para garantizar que el Trabajo en Red entre Aliados se fortalezca como un proceso social autónomo, que permanentemente esté discutiendo y generando reflexiones sobre los hallazgos e incidiendo en la implementación de las recomendaciones.
El boletín digital ‘Verdad en Acción’ nace como una vitrina de esta unión, que le da visibilidad a las acciones, las anima y busca apoyar su difusión, para que las conozca el país y el mundo. Es una exhortación a mantenernos unidos/as en este propósito y trabajo conjunto para construir un futuro en el que la paz sea un deber y un derecho para las generaciones actuales y venideras. ¡Esperamos que lo disfruten y lo rueden!